Estuve tres noches y la ubicación fue muy buena, a un paso del Empire State. La vista desde la habitación fue increíble. Disfruté de la comodidad del wifi, que funcionó perfectamente en todo momento. aproveché el desayuno gratuito, aunque se volvió repetitivo por la cantidad de gente. Como chef de Sevilla, la experiencia general fue satisfactoria.

Vista del Empire State Building, ubicación cerca de atracciones, conexión Wi-Fi en habitaciones.

Los ascensores son muy lentos y no hay suficiente personal para atender a todos los huéspedes en horas pico de desayuno!!! También, el baño tiene poco espacio para dejar cosas y la falta de privacidad por las puertas de vidrio es un problema!!!

Recomiendo utilizar la opción de almacenamiento de equipaje antes del check-in para explorar sin las maletas, especialmente si llegas temprano.

La ubicación es excelente, a pasos del Empire State. Sin embargo, el área de desayuno es demasiado pequeña para la cantidad de huéspedes.

La ubicación lo es todo

La ubicación en Midtown es perfecta, con fácil acceso a atracciones turísticas. Nuestra habitación tenía una hermosa vista del Empire State Building y el personal siempre fue muy amable.

Sin embargo, el espacio del comedor para el desayuno era muy pequeño y había que esperar mucho para obtener una mesa. Además, el ascensor a veces tardaba más de lo esperado.

mi segunda estadía en nueva york fue aún mejor en este hotel. las habitaciones son amplias y la cama súper cómoda para descansar después de explorar. disfruté de las vistas del empire state desde mi habitación, ¡realmente valió la pena!

el desayuno no tenía mucha variedad.

Todo bien, pero el ascensor estaba lento.

comodidad en el corazón de la ciudad

La habitación era moderna y bien equipada, con un microondas y nevera que fueron muy útiles durante nuestra estancia. Además, la limpieza diaria fue excepcional, haciéndonos sentir como en casa. Las vistas de la ciudad desde nuestro alojamiento eran realmente impresionantes.

El espacio para el desayuno era demasiado pequeño en horas pico.

La habitación estaba bien equipada con un microondas y una nevera, lo que facilitó la preparación de refrigerios. La limpieza diaria fue excelente, y el personal fue muy amable y siempre servicial durante toda nuestra estancia.

Sería ideal un ascensor adicional para mayor comodidad.

Ubicación excelente, a un paso do Empire State. Habitaciones comodas, ideales para descansar despois de todo un día de andar. O almorzo un pouco áxil pero correcto. O único malo, o espazo da sala de xantar, estreito para tanta xente.

La ubicación de este hotel es fantástica, a pasos de la Quinta Avenida y cerca de varios puntos de interés, lo que facilita los desplazamientos a pie. Las habitaciones son espaciosas y cómodas, bien equipadas con microondas, nevera y TV de 50 pulgadas, perfectas para familias.

Sin embargo, la experiencia se vio afectada por algunos inconvenientes. Solo funcionaba un ascensor durante mi estancia de seis días, lo que provocó largas esperas, especialmente en las horas pico del desayuno. El área dedicada al desayuno es demasiado pequeña para la cantidad de huéspedes, lo que genera un ambiente caótico y repetitivo. El menú del desayuno carece de variedad, y el personal a veces comenzaba a retirar los alimentos antes de que todos los comensales hubieran terminado. En una ocasión, me tomó 20 minutos bajar con el equipaje debido a la saturación del ascensor.

ideal para una visita a nueva york, limpieza y desayuno gratis que ahorra tiempo

Springhill Suites es una joya en Manhattan. Estuvimos en una habitación grande, perfecta para nuestra familia. La ubicación no podría ser mejor. a solo pasos de Times Square y otras atracciones. La limpieza rigurosa de las habitaciones realmente sobresalió. El desayuno, aunque simple, es un gran ahorro de tiempo y dinero. Sin sorpresas desagradables, todo fue tal como esperábamos. ¡Sin duda lo recomendaría!

La habitación contaba con vistas impresionantes al Empire State y camas cómodas. Sin embargo, el ascensor era insuficiente en horas pico, lo que generó esperas largas. Además, el área del desayuno era pequeña para la cantidad de huéspedes, lo que creó un ambiente un tanto caótico.

La habitación era muy limpia y la vista al Empire State, espectacular. El desayuno, aunque básico, tenía buena variedad y el personal siempre fue amable y atento.

Por mi no hay nada que mejorar.

La habitación era bastante espaciosa y tenía una vista increíble del Empire State. Las camas eran súper cómodas y bien equipadas con microondas y nevera, lo cual fue genial para manejar algunos snacks. Sin embargo, hubo un problema con los ascensores, ya que solo había dos y en las horas pico eran insuficientes. Pero, a pesar de eso, la limpieza de la habitación fue excelente y se sentía muy acogedora.